Después de más de 30 años de ejercicio profesional, ya tocaba hacer un proyecto enteramente personal en el que entender al cliente y asesorarle a medida fuera posible, en donde pudiera trabajar de manera flexible con los mejores profesionales de cada campo en sus propios términos, y en donde los clientes contaran conmigo no solo por mis conocimientos técnicos sino por mi manera de analizar las realidades complejas. Y tener libertad para crear, imaginar proyectos como Consent Commons y poderlos hacer realidad.
Nuestro futuro como abogados no está en realizar tareas repetitivas, ni tan siquiera en lo que seguimos considerando artístico, sino en analizar los riesgos legales de nuestros clientes y encontrar soluciones a la medida.
En definitiva, artesanía legal con calidad y diseño tecnológico. Buscar soluciones solidas en tiempos líquidos en un espacio de creación sin imposturas.
Eso es The Llaneza Firm, slow law inteligente sin imposturas en tiempos líquidos.